martes, 24 de enero de 2012

Una perspectiva bíblica de la soltería (1 Cor. 7:8-9)


Del escritorio del Pastor:  Una perspectiva bíblica de la soltería (1 Corintios 7:8-9).
            Muchos solteros después de una desilusión amorosa tienen como slogan:  Mejor solo que mal acompañado.  Desde luego no siempre es así.  En nuestra cultura hispana, hemos estereotipado la edad para casarse y cuando la persona no lo ha logrado, entramos en un proceso de presión como por ejemplo:  Hey, se está pasando el tren.  Debemos estar claros, que no hay una edad límite para casarse y que si no lo logra en esa edad, ya perdió toda esperanza.  Veamos qué dice la Biblia respecto a la soltería.
            Hay algunas causas del por qué la persona está así.  Por ejemplo estudios, anda en la búsqueda de su media naranja, quizá es una persona tímida y no puede entablar una relación con el fin de formalizarse.  Por el otro lado, hay personas en esta de soltería por decisión propia.  Se sienten bien así y no tienen ninguna intención de cambiar su estado.  En la soltería podemos encontrar ventajas y desventajas.  Algunas ventajas están el poder desarrollar personal y profesionalmente.  Ya que disponen de tiempo lo saben aprovechar muy bien.  Facilita el desarrollo de amistades profundas.  Tiene mayor privacidad y obviamente más libertad de movimiento.  Algunas desventajas:  fomenta la soledad.  Pueden haber sentimientos de ser rechazado y hasta marginados por la sociedad.  Puede provocar frustración y presiones de índole sexual mayormente en los solteros que no desean serlo. 
            Veamos qué nos dice el apóstol Pablo en el pasaje arriba indicado.  Digo, pues a los solteros y a las viudas, que bueno les fuera quedarse como yo.  Pablo no está promoviendo la soltería.  Aquí se dirige a  un grupo de personas que pueden ser viudos adultos y que quizá les resultaría muy duro iniciar una nueva relación y tener hijos lo cual no es fácil.  Esto mismo se aplica a las mujeres.  Pero en el siguiente versículo deja la puerta abierta, pero, si no tienen el don de continencia, cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando.  Pablo no reprocha a las personas que entran en esta categoría ni tampoco son descalificadas por Dios.  Pecado es aparentar que está bien cuando no lo es así.  Por lo tanto, todas aquellas personas solas que no desean estarlo, deben buscar la guianza del Señor en buscar el cónyuge que llene sus expectativas.  Dios nos ha creado con necesidades sexuales que deben ser satisfechas dentro de matrimonio únicamente.  Haciendo un pequeño paréntesis, Pablo en 1 Corintos 7:12-15 cuando en la pareja uno de ellos es creyente  y el otro  no.  Si el no creyente acepta vivir con el creyente, Pablo dice, no abandonarlo, no se separe.  Pero sí es lo contrario, Pablo dice que el creyente lo deje ir. Dios nos ha llamado a paz y si no hay otra alternativa con tal de promover una atmósfera de paz, debe separarse.
            En Mateo 22:30 Jesús nos adelanta que el matrimonio es un estado temporal mientras estemos aquí en la tierra.  Porque en la resurrección ni se casarán, ni se darán en matrimonio.  Tener presente, el matrimonio en el presente es necesario para ayuda mutua y la procreación.  Es un estado temporal aquí no en la eternidad.  Sin duda alguna, sin desmeritar el matrimonio, las relaciones en la eternidad serán perfectas y mucho mejor que el matrimonio.  No habrá egoísmo, pleitos, celos, contiendas,  ofensas, no habrán lágrimas.  Por ello, se debe aprovechar la soltería para servir al Señor (1 Corintios 7:32).  Quisiera, pues, que estuvieses sin congoja.  El soltero tiene cuidado de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor.  En cierta manera, el soltero tiene alguna ventaja en el servicio al Señor.  Puede manejar su tiempo con toda libertad.  En el campo misionero hay muchas mujeres y hombres solteros sirviendo al Señor.  Pueden administrar sus recursos con criterio propio.  Un soltero está libre de las presiones familiares (v. 32-34),  No así los casados. Así que como iglesia, debemos tener en alta estima este sector de la congregación y no menospreciarles.  En la eternidad ¡todos lo seremos!  Bendiciones a todos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario