lunes, 23 de septiembre de 2013

Aceptando con agrado el plan de Dios para mi vida (Una perspectiva bíblica sobre la soltería) 1 Corintios 7:20-28.


Aceptando con agrado el plan de Dios para mi vida (Una perspectiva bíblica sobre la soltería)  1 Corintios 7:20-28.
            Estaba tan seguro de haber oído la voz de Dios desde el primer día que salimos.  Casi de forma audible pude escuchar:  Ella es la mujer que tengo para ti.  Después de tres meses de noviazgo decidimos casarnos.  Al cumplir el medio año de matrimonio de aquella primera cita, ya éramos marido y mujer.  Y ahora, dos años después, estamos destrozados después del matrimonio.  ¿Por qué Dios no me dijo audiblemente que ella no era?.  Debido a la anterior, muchos solteros tiene el slogan:  Mejor sólo que mal acompañando.  Frase muy usada por quienes luego de iniciar una relación, mas tarde se desilusionan.    Podemos encontrar una serie de razones del por qué de la soltería o permanecer solo después de romper una relación:
            1.  Por circunstancias:  son aquellos que lo están o han permanecido así por circunstancias externas o que no lo esperaban así (viudez o divorcio).
            2.  Solteros por elección.  En algunos casos tienen don de continencia o celibato.  Cuando es el caso, este don trae bendición y gozo en la persona.
            3.  Solteros por la voluntad de Dios:  forma parte del plan de Dios por razones especiales.
            Debemos tener claro, que no tener el don de celibato y permanecer soltero forzado, puede traer frustración moral y espiritual.  En el caso de los solteros sin desearlo, muchos de ellos se preguntan, ¿hasta cuándo debo seguir esperando?  La pregunta tiene su validez como también ¿con quién me casaré?  ¿Hay alguna edad límite para casarse?  Obviamente que no lo hay.  En el caso de nosotros los hispanos, culturalmente tenemos la costumbre de presionar para casarse a aquellas personas que para nuestro gusto ya deben haberlo hecho.  Tenemos algunas conocidas expresiones como:  ¡Te está dejando el tren!  ¡Te quedarás para vestir santos o forrar Biblias!  Y así por el estilo. No recomendamos hacer este tipo de comentarios o presiones a nadie.  Muchas veces el soltero se ve obligado a casarse por presiones o complacer a terceros y tristemente se casa con la persona equivocada.  Otros por el contrario, no toman la decisión por temor al compromiso. 
            Pablo en 1 Cor. 7:7 dice:  Quisiera más bien que todos los hombres fuesen como yo, pero cada quien tiene su propio don de Dios….Pablo no prohíbe el matrimonio ni tampoco el celibato.  Ambos estados deben venir como un don de Dios.  El permanecer soltero en este caso, debe ser una decisión personal.  Desde luego que hay varias ventajas en ser soltero.  Oportunidad de estudios, desarrollo personal y profesional.  Se facilita el desarrollo de amistades profundas.  Se disfruta de privacidad personal y se puede disfrutar también de más libertad de movimiento.  Algunas desventajas:  puede fomentar la soledad (en algunas personas) como también sentimientos de rechazo y hasta sentirse marginado. Puede provocar frustraciones y presiones de índole sexual (mayormente con solteros que no desean serlo). 
            ¿Qué dice la Biblia sobre la soltería?  Lo primero, no debe ser forzada.  Bueno les fuera quedarse como yo, pero si no tienen don de continencia cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando (1 Cor. 7:8-9).  Pablo se dirige a todos aquellos solteros por diversas razones.  La soltería no debe ser forzada.  Quemarse, es una expresión figurada para describir la pasión sexual en forma promiscua fuera del contexto matrimonial.  Entendemos que la presión sexual no debe ser nunca la mejor razón para casarse.  Lo mejor es casarse y que seamos la persona correcta.  No casarse por presiones sexuales con el primero que aparezca y después fracasemos. 
            Pablo da a las viudas jóvenes (no precisa edad) que se casen pero es necesario que tomen una buena decisión al respecto (1 Cor. 7:39).  Deben dar un buen testimonio.  Demostrar madurez espiritual y emocional.  No estarse quejando de su edad o vejez (Prov. 20:29, La hermosura de los ancianos es su vejez).  No le agregue años a su vida sino lo contrario, agréguele vida a sus años.  Cuide siempre su presentación personal (vestirse adecuadamente 1 Pedro 3:3-4, 1 Timoteo 2:9).  Todo soltero por cualquier razón, debe aprovechar su estado para servir al Señor (1 Cor. 7:32, Quisiera, pues, que estuvieseis sin congoja.  El soltero tiene cuidado de las cosas del Señor, de cómo agradar al Señor.  En cierta forma, el soltero tiene ventajas en el servicio a Cristo.  Manejar su tiempo con entera libertad.  muchas mujeres solteras están sirviendo al Señor especialmente en las misiones.  No tienen que estar bajo la autoridad especialmente de un esposo no creyente que pueda oponerse a que sirva en algún ministerio o que se congregue.  Administrar sus recursos con criterio propio.  No tendrán aflicción de la carne (v. 28).  Sin menospreciar al matrimonio, este estado puede traer presiones, dificultades y ajustes permanentes e inevitables en la vida.  En pocas palabras, un soltero está libre de las preocupaciones de tener una familia y sostenerla (v. 32-34).  Para los casados su mayor preocupación es su propia familia y que sus necesidades sean suplidas.   A los solteros, Pablo recuerda:  Para que sin impedimento os acerquéis al Señor (v. 35).  Que las iglesias no caigamos en el error de menospreciar a los solteros todo lo contrario, apoyarles y darles el espacio que ellos necesitan y requieren.  Dios los necesita y la iglesia también.  El Señor honra su estado como el matrimonio también.  Debemos recordar, en la eternidad todos seremos solteros.  Más de alguno dirá:  ¡Uf, que alivio!  Bendiciones a todos.  

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