Jesús nos muestra
un nuevo rumbo (Mateo 5:38-48).
La ley del talión
ha sido mal interpretado. Algunos creen
que es una oportunidad para vengarse de algún mal o daño recibido. Sin embargo es todo lo contrario. La ley del talión, era una oportunidad donde se permitía la retribución exacta del daño
recibido. Así mismo, se prohibía tomar
la ley en nuestras propias manos mediante le venganza. Hay tres pasajes que lo citan con diferentes
aplicaciones (Éxodo 21:22-25, Levítico 24:19-20 y Deuteronomio 19:15-21). Así que la ley del talión era un principio
jurídico de justicia retributiva en la cual la norma imponía un castigo igual
al cometido.
En el pasaje arriba mencionado, Jesús
en el v 38 lo cita, Oísteis que fue
dicho: Ojo por ojo, y diente por
diente. En el siguiente versículo 39
agrega, Pero yo os digo…con esta
expresión Cristo muestra su autoridad divina e indica que su palabra es nueva y
nos muestra un nuevo y mejor camino a tomar.
Jesús condena el espíritu de falta de amor, odio y el deseo de vengar el
daño recibido. Nos enseña cómo debemos tratar a nuestro
prójimo. Veamos:
1.
Para el israelita el prójimo era alguien únicamente de su pueblo, su
raza y religión.
2.
La ley mosaica ya legislaba cómo tratar al prójimo. Levítico 19:17-18 dice, No aborrecerás a tu hermano en tu corazón, razonarás con tu prójimo…No
te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu
prójimo como a ti mismo. Yo Jehová…el
verso 34 agrega, Como a un natural de vosotros tendréis al
extranjero que moré entre vosotros, y lo amarás como a ti mismo.
3.
Éxodo 23:4-5 nos muestra cómo tratar a aquella persona que no nos
simpatizaba, Si encontrares el buey de tu
enemigo o su asno extraviado, vuelve a llevárselo. Si vieres el
asno del que te aborrece caído debajo de su carga, ¿le dejarás sin
ayuda? Antes bien le ayudarás a
levantarlo.
4.
En Proverbios 25:21-22 vemos un principio conocido por los rabíes: Si el
que te aborreciere tuviere hambre, dale de comer pan, y si tuviere sed, dale de
beber agua. Porque ascuas de fuego amontonarás sobre su cabeza y Jehová te lo
pagará. Mismo principio vemos en
Romanos 12:20, Si tu enemigo tiene
hambre, dale de comer, si tiene sed, dale de beber. Así harás que la arda la cara de vergüenza (TLA).
Después de exponer lo anterior veamos
la posición del NT y la de Jesús
mismo. Venganza es el desquite contra
alguien que nos ha hecho algún daño. El
espíritu del mundo es, la venganza es
dulce. El que me la hace, me la paga así
por el estilo. Romanos 12:17, 19 nos
dice, No paguéis a nadie mal por mal, procurad lo
bueno delante de todos los hombres…No os venguéis vosotros mismos, amados míos,
sino dejad lugar a la ira de Dios…Procurad (esforzarse), lo bueno es
mantener una conducta correcta de forma visible. Veamos el nuevo rumbo que Jesús expone:
v. 39:
No resistáis al que es malo, a
cualquiera que te hiera en la mejilla, vuélvele también la otra: es mostrar
en palabra, actitud y hechos no tener rencor o deseo de venganza. ¿Cómo reaccionamos al insulto recibido? Prov. 15:1, La blanda respuesta quita la ira, mas la palabra áspera hace subir el
furor. Ef. 4:26-27, 29.
v. 40: al que
quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa: No siempre recibiremos un juicio
justo. ¿Cómo debemos reaccionar al
respecto? 1 Cor. 6:1-7
v. 41: a
cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, vé con él dos: es cuando no nos limitamos a cumplir
nuestro deber únicamente sino hacer mas y hacerlo gustosamente. Deut 15:7-8:
respuesta a la necesidad de nuestro prójimo. Debe ser un trato generoso.
v. 43-44: Oísteis
que fue dicho: la primera parte del
versículo viene de Lev. 19:18 pero la segunda parte aborrecerás a tu enemigo es la forma cómo los fariseos enseñaban y
aplicaban este principio. Jesús rechazó esta mala práctica. Éx.23:4-5, Si encontrares el buey de tu enemigo o su asno extraviado, vuelve a
llevárselo. Si vieres el asno del que te
aborrece caído debajo de su carga, ¿le dejarás sin ayuda? Antes bien le ayudarás a levantarlo. El
principio de Jesús (v. 44):
Amad a vuestros enemigos: amad (verbo ágape): es la mayor de las virtudes cristianas (1
Cor. 13:13). Es una deliberada
convicción de no sentir rencor o venganza contra aquel no nos ha hecho
daño. Es tratarnos como Dios lo
hace.
Bendecir a los que os maldicen: Bendecir: decir bien.
Hablar bien, invocar favor de algo.
Es la expresión de un deseo benigno a favor de alguien. Prov. 24:17-18, Cuando cayere tu enemigo, no te regocijes, y cuando tropezare, no se
alegre tu corazón. No sea que Jehová lo
miré, y le desagrade y aparte de sobre él su enojo.
Haced bien a los que os aborrecen:
es ir mas allá de las palabras.
Es buscar formas de practicas (con hechos) el amor de Dios (1 Tes. 5:15,
Romanos 12:20).
Orad por los que os ultrajan (maltrato): La oración busca la misericordia para aquel
que nos ha hecho algún daño y que Dios les perdone. Es llevar en oración a aquellos que nos han
maltratado alguna vez. Es una exigencia
suprema. Buscar la paz y perdón por
medio de la oración.
c. Razón de la demanda (v. 45): Así
demostrarán que actúan como su Padre Dios, que está en el cielo…Mateo 5:16,
Así alumbre vuestra luz delante de los
hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que
está en los cielos. Amar como Dios nos hace mostrar que somos sus
hijos. Vivir de acuerdo al llamado que Dios nos hizo (Ef. 5:1-2 Sed,
pues, imitadores de Dios como hijos amados, y andad en amor, como también Cristo
nos amó…).
Es toda una intención de cambio lo que
Jesús nos muestra. Ya lo
pasado…pasado. Cristo con su autoridad
divina nos muestra cómo debemos tratarnos unos a otros. Sin duda alguna, el perdón, el amor y la paz
debe ser nuestra referencia. No paguéis
a nadie mal por mal….es lo que debemos hacer. No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal (Romanos
12:21). Dios les bendiga.
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